Talla en Madera
En el Perú, el tallado en madera se inicia tras la llegada de los españoles, debido a que trajeron maderas de pino y cedro desde el Caribe. Durante la Colonia, la talla en madera logró un gran desarrollo, principalmente debido a que fue utilizada en la decoración de iglesias y conventos, requiriéndose una gran producción de retablos, cuadros y mobiliario religioso ornamental.
Una muestra del apogeo del trabajo en madera hecho durante la Colonia se puede observar en el púlpito del barrio de San Blas, en la ciudad de Cusco. Obra maestra elaborada en un bloque de madera, cuyos acabados son un testimonio de lo complejo que pueden ser los estilos barroco y plateresco españoles.
La madera, al ser utilizada para el tallado, debe caracterizarse por ser ligera, flexible y modelable. Asimismo, debe presentar una resistencia a la tensión muy privilegiada. La madera también puede combinarse con otros materiales, incluyendo el cuero, textiles, metales y otros.
Variedades que se utilizan en el Tallado en Madera
Se puede destacar que la selva peruana llega a presentar una amplia variedad de especies madereras de alta calidad, incluyendo el cedro, la caoba, el ishpingo, el palo rosa, el tornillo, el palo peruano y la chonta, principalmente empleada para la talla de imágenes religiosas. La costa y la sierra también presenta maderas que se adaptan perfectamente a la talla, por ejemplo, el aliso y el chachacomo.
Aliso y el chachacomo
Actualmente, el poblado de Molinos, en Junín, considerado como uno de los mayores productores de artículos de madera, utiliza principalmente el aliso y chachacomo. Estas maderas son conocidas por no “soltar sabor”; es decir, no modifican el sabor de la comida, por lo que son utilizadas para la fabricación de utensilios de cocina. Ambas maderas también se utilizan en la fabricación de muebles, esculturas, muñecos, piezas decorativas y juguetes, un ejemplo son los conocidos equilibristas de brazos móviles y las máscaras utilizadas en la danza del wakón.
Durante la celebración de la festividad en Molinos, tanto hombres como mujeres se colocan las máscaras fabricadas por los artesanos, al mismo tiempo que cubren sus cuerpos con frazadas decoradas con un otorongo o jaguar peruano. Según la mitología nativa, el otorongo es el guardián de la kaypacha, es decir el mundo que habitamos.
Zapote
En la costa norte del Perú, en los últimos años se emplea una madera parecida al chachacomo llamada zapote. Su color es amarillento y tampoco “suelta sabor”, por lo que es utilizado para fabricar instrumentos de cocina; así como también joyeros, polveras, entre otros más.
La Selva es el principal productor de tallados en madera
La selva se caracteriza por manufacturar una gran cantidad de productos de madera. Entre los nativos de las tribus se pueden encontrar remos, canoas, cerbatanas, figuras humanas y figuras ceremoniales.
Uno de los artículos a destacar es el manguaré, tambor semiótico que anuncia acontecimientos de gran importancia, como por ejemplo la muerte de algún personaje trascendente. La elaboración de manguaré es similar a la técnica empleada para elaborar canoas: un árbol ahuecado es quemado pacientemente hasta lograr darle la forma de tambor. Un dato curioso es que su confección dura casi el mismo tiempo que elaborar una canoa.
Hoy en día, cada vez son más las nuevas maderas apreciadas: incluyendo el palo peruano, el estoraque, el palo de acero de color verde y también las palmeras de variados colores.